Jon Gondán: “Aunque haya gente que piense que ser joven es un problema para ser alcalde, yo pienso que es un plus”

Por un mes y medio es el alcalde más joven de Navarra tras lograr para Geroa Bai uno de los feudos mejor guardados por UPN. Con él, el cambio llega a Zizur Mayor. 

A quién se le ocurre meterse en política con 18 años.

-En mi casa me dicen que soy político desde que nací. Desde pequeño veía las noticias y me preocupaba por lo que podía pasar en el pueblo o lo que sucedía en otros sitios. Siempre me ha gustado la política en el sentido de trabajar por el pueblo, porque creo que la política es más que estar en una lista u ostentar un cargo.

¿Cómo dio ese paso?

-La razón es que había una persona, Uxue Barkos, a la que me gustaba mucho escuchar, era una maravilla cuando la veía en la televisión, era una gozada y cuando cumplí los 18 años me puse en contacto con Nafarroa Bai para colaborar. Había un grupito de jóvenes, empecé con ellos y al tiempo tuve una llamada del entonces alcalde, Pedro Huarte, para que ayudara al grupo municipal que gobernaba el Ayuntamiento. Cuando me ofrecieron ir de segundo les dije que lo tenía que consultar con mis padres.

¿Y qué le comentaron en casa?

-Que sí, pero que siguiera con los estudios. Estaba terminando el último grado superior cuando di el paso. No me arrepiento en absoluto. Me ayudó el haber estado un año trabajando en el Ayuntamiento, los apoyos que tuve desde el primer momento y el contacto directo y la ayuda permanente de personas como Uxue o de Pedro Huarte. He estado muy respaldado.

Entre tanto ajetreo con la campaña y las elecciones, ¿ha encontrado tiempo de seguir sus estudios?

-Claro. Ahora estoy esperando las notas (se ríe), pero creo que irá normal, no suelo tener problemas.

Para buena nota la del 24-M.

-La verdad es que la nota fue muy buena. Los resultados fueron muy positivos y nos quedamos a un puñado de votos del quinto concejal. En un feudo conservador, gobernado por UPN -a través de los independientes primero, y después con propio marca- los regionalistas sacaron sus peores resultados y el nuestro fue magnífico, igualando los logrados por Nafarroa Bai hace ocho años. Nos hemos quedado a solo 333 votos de UPN cuando históricamente la segunda fuerza quedaba a más de 1.200 votos de la primera. La gente ha votado mayoritariamente por el cambio, como lo demuestra el hecho de que se ha pasado de 9 a 12 concejales progresistas y que UPN es la única fuerza conservadora con 5. Es una oportunidad de cambio y nos ha puesto a Geroa Bai en un lugar preferente para liderarlo.

¿Qué fórmula empleó?

-Fue un trabajo de voto a voto, aunque más allá del trabajo de campaña -que fue muy bueno y nos permitió trasladar el mensaje de lo que habíamos hecho en los tres últimos años- la fórmula fue tener mucha interrelación con los vecinos y vecinas de Zizur. Además, cuando estuvimos en la oposición tuvimos una postura dialogante y constructiva cuando los proyectos eran buenos para Zizur. Esa actitud y nuestras iniciativas en la pasada legislatura han sido valoradas por los vecinos.

Su carrera está siendo meteórica. Con 19 años edil y alcalde más joven de Navarra con 23. A este paso...

-¡Quién sabe donde puedo acabar! (Se vuelve a reír). No sé lo que sucederá en el futuro. Hay 4 años por delante y lo que tengo ahora es orgullo, pero sobre todo responsabilidad porque como alcalde soy el que marca las directrices y el que representa a todos los zizurtarras, me hayan votado o no.

¿Sus amigos no se sentirán un poco cohibidos al tener a su lado a la primera autoridad municipal?

-Aparte de las coñas que me han hecho, lo primero que me han dejado claro es que la próxima vez que quedemos para tomar algo será fuera de Zizur, porque el otro día salimos a echar unas cañas y me paró todo el mundo. Nos costó 40 minutos.

¿Ya sabe si le votaron todos los amigos de su cuadrilla?

-La mayoría sí. Creo que fue un voto a la persona y sé de amigos que han votado a Geroa al Ayuntamiento porque iba yo, con un proyecto y unas personas que ellos conocían, pero no al Parlamento.

¿Cuándo comenzó a darse cuenta de que efectivamente iba a ser el próximo alcalde de Zizur Mayor?

-El resultado del 24-M fue de celebración y de muchas cuentas. Aunque había unas cuantas combinaciones, me fui a la cama convencido al 90% de que iba a ser alcalde.

¿Cree que su juventud puede ser más un problema o una ayuda?

-Aunque haya gente que piense que ser joven es un problema para ser alcalde, yo pienso que es un plus, porque además pienso que el punto de vista de la juventud se ha tenido muy abandonado. No se puede decir que por ser un alcalde más maduro, el Ayuntamiento va a tener más estabilidad. Puede que sí o puede que no.

¿Qué piensa aportar con 23 años?

-Creo que por mi trabajo en la pasada legislatura me he ganado el respeto de los compañeros de Corporación, al margen del ideario de cada uno. Vamos a trabajar por la juventud, que ha estado olvidada y por momento ha sido un problema para los ayuntamientos. Se ha trabajado poco con los jóvenes y solo hace falta verlo en las reuniones que hemos organizado estas semanas para elaborar el programa.

En su discurso dijo que no iba a resultar una legislatura fácil por la dichosa economía, por cuestiones presupuestarias. Y yo que pensaba que era uno de los municipios más ricos del Estado.

-Tenemos un Ayuntamiento saneado, no debemos nada, pero tenemos una peculiaridad, ya que pese a tener 23 millones de euros para acometer cualquier tipo de inversión, el gasto corriente es justito. Es decir, podríamos poner en pie la Casa de Cultura más grande de Navarra, pero no habría dinero para mantenerla.

¿Qué piensan hacer con Ardoi?

-Ardoi es el barrio fantasma, el barrio olvidado en estos cuatro años y lo que vamos hacer, junto al resto de formaciones que apuestan por el cambio, es revitalizarlo con los servicios básicos que necesitan.

¿Y con el polígono? Porque sigue vacío después de varios años.

-Lleva siete años y pico vacío. La gran parcela central es de Leclerc, que se comprometieron a hacer un proyecto que a día de hoy no está. En las próximas semanas nos pondremos en contacto con ellos, porque es importante que empiecen a pensar en Zizur. Sé que hubo algún movimiento a principios de año, pero desde hace dos años estamos esperando algo concreto que sirva de catalizador de actividad.

¿Habrá Zizur Arena?

-Fuimos el único grupo que nos opusimos al proyecto, que no tenía informe de viabilidad y que según UPN estaba valorado en 8 millones, aunque después nos comentaron unos asesores que podía ascender a 15 ó 16. Así que nos olvidamos, pero lo que vamos a reformar son las instalaciones deportivas, con menor cuantía, desde una gestión abierta y transparente a la ciudadanía.

Publicado en Diario de Noticias.