Transitando hacia un nuevo modelo industrial
Por Mikel Asiain, parlamentario de Geroa Bai
Se recoge lo que se siembra. Después de cuidarlo, de atenderlo, de mimarlo, de abonarlo, de quitar las malas hierbas, de regarlo, de… en ocasiones, y dependiendo de lo plantado, al cabo de varios años. La paciencia es una de las máximas. La otra, la perseverancia.
Y, por ello, ahora recibimos buenas nuevas de cuestiones planteadas ya hace uno, dos, tres, cinco, y hasta ocho años, allá por 2015…
Hace apenas un mes se hacía pública la implantación en Cortes de la compañía EnergyLOOP con el objetivo de reciclar palas eólicas, con una inversión de 10 millones de euros y la creación de 100 puestos de trabajo.
Quince días más tarde, la noticia de la llegada de Flamasats a Aoiz, que va a suponer la creación de 250 empleos. Con una inversión de 40 millones de euros -inicialmente de 25, para continuar por fases con el resto- por parte de la empresa catalana, fabricante de los conocidos mecheros Clipper, que espera poder iniciar su actividad en la villa agoizka, como muy tarde, a comienzos de 2024.
Anteriormente -hace tan sólo unos meses- habíamos conocido que Madergia se instalaría también en Aoiz, con la creación de 36 nuevos empleos directos, y otros tantos indirectos. Con ayuda de Nasuvinsa se construirá una nave de 10.000 metros cuadrados, para que la empresa -que ocupa un lugar de liderazgo en el mercado del diseño y fabricación de estructuras y materiales en madera para la construcción de edificios eficientes energéticamente- esté operativa para mediados de 2024, con nueve millones de inversión.
Acciona y Plug Power, por su parte, construirán en Sangüesa una planta de hidrógeno verde de 25 MW, que servirá para abastecer de energía limpia a las empresas de la zona. Casi 90 millones de inversión con el afán de ponerla en marcha en 2024, y en cuyo proceso de construcción se crearán 500 empleos.
Nordex y Sodena invertirán 30 millones de euros en una nueva planta de producción de electrolizadores para la generación de hidrógeno verde en Barasoain. El proyecto verá la luz a través de la colaboración público-privada.
La planta de hidrógeno verde, por otro lado, de la Ciudad Agroalimentaria de Tudela entrará en funcionamiento en tres años, y conllevará una inversión de más de 8 millones de euros. Tendrá una potencia de electrólisis inicial de 3,2 MW en una primera fase piloto, ampliable después a 10.
Y otra reciente: el complejo eólico de Enerfin en la Ribera, con una inversión de 157 millones, y mil empleos en la fase de construcción.
Positivas noticias, todas ellas, que tuvieron su culmen con la referida a la inversión en Volkswagen: 1.024 millones de euros por parte de la compañía alemana en su planta de Landaben, la inversión industrial más grande jamás realizada en nuestra Comunidad, a decir del Consejero de Desarrollo Económico y Empresarial. Supone el tránsito hacia un modelo de vehículo eléctrico, desterrando definitivamente el de combustión tal y como la propia Unión Europea establecía la semana pasada para el año 2035. Anticipándonos, por tanto, a una decisión que todos preveíamos.
Garantizando, además, el empleo directo en las naves de nuestra Comunidad, y sin perder de vista el indirecto, a través de la amplia red de suministradores y proveedores que se ha tejido a su alrededor: en torno a 120 pymes que dan trabajo a casi 7.000 personas.
Noticias positivas, todas ellas. No aquel, desde luego, “rosario de buenas noticias” sobre las que, con cierta frecuencia, hablaba la señora Barcina, y de las que nunca se supo. No noticias jabón, como ha definido alguien, ni champú, ni acondicionador, porque desde Geroa Bai siempre hemos apostado por un trabajo serio y riguroso, persistente, sin ruido que distraiga, pero con resultados, aunque luego alguien le ponga -o se ponga- el envoltorio, lo adorne con celofán, luces de neón y contrate a una banda de música. La diferencia entre una equilibrada comunicación y el exceso de exposición pública, puede llevar a la pura extravagancia…
Noticias que vienen a poner el foco en la importancia que la industria tiene en el PIB de esta Comunidad; y que desmienten, rotundamente, a quienes hablaban del erial en el que se estaba convirtiendo o se convertiría. ¿Cuándo?
Una industria, además, que apunta a lo verde. Una industria que está respondiendo a la necesidad de esa imperiosa transición energética. Una industria que confía en un ecosistema consolidado; que cree en las medidas fiscales implantadas en los últimos años para potenciar, precisamente, ese nuevo modelo industrial; y que valora la colaboración pública establecida desde el Departamento de Desarrollo Económico y Empresarial, y desde Sodena.
Somos conscientes, en Geroa Bai, que no se llega a todo ello, a ninguna de las inversiones que acabo de plantear, de la noche a la mañana, sino mediante una base sólida y un trabajo constante.
Transición verde, en definitiva, de la industria de nuestra Comunidad.
Una apuesta rotunda desde Navarra donde fuimos pioneros -a través de la eólica- hace más de 30 años, hasta que alguien vendió la gallina de los huevos de oro. Los mismos, o sus amigos, o los amigos de sus amigos, que unos años más tarde pusieron impuestos al sol legislando contra el futuro del planeta.
Los mismos que ahora dudan, que ahora cuestionan el trabajo de ese departamento liderado por Geroa Bai.
¿Lecciones? Ninguna. Ni de un lado, ni del otro.