Geroa Bai cree que el acuerdo alcanzado ayer por el Gobierno foral en Canasa supone un paso decisivo para que la Ribera tenga el agua que necesita
El portavoz parlamentario de Geroa Bai en la comisión de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Unai Hualde, ha considerado que el acuerdo alcanzado ayer en el seno de CANASA aprobando los pliegos para desarrollar los proyectos constructivos de la segunda fase del Canal de Navarra confirma la apuesta decidida del actual Gobierno de Navarra para que la Ribera tenga el agua que necesita.
Según Hualde “por mucho que se quiera retorcer la realidad, los sucesivos hechos desmontan las palabras del discurso que durante todo este tiempo vienen haciendo UPN y PP con respecto al agua. Resulta llamativo que Beltrán y Esparza intenten hoy sacar pecho cuando sus formaciones fueron quienes decidieron paralizar esta fase de conducción a la Ribera en 2013 y nunca más volvieron a retomar los trabajos necesarios para reanudarla como se ha hecho en los últimos meses”. Geroa Bai considera especialmente grave que quien lo diga sea el Sr. Esparza, entonces Consejero del ramo y, por tanto, uno de los responsables directos de la decisión de paralización.
La coalición considera que, frente a las críticas llevadas a cabo por UPN y PP a la labor de estudio y revisión de esta infraestructura desarrollada por el actual Gobierno en 2016 ayer quedó demostrada la utilidad de la misma por haberse incorporado estos estudios a los pliegos. Según Hualde “la realidad vuelve a enmendar la plana a quienes hablan de dos años perdidos. Es la primera vez que alguien se toma en serio desde el Gobierno Foral conocer cuáles son las verdaderas necesidades de agua de la Ribera para boca, riego e industria. Y es la primera vez que el Gobierno Foral se toma en serio conocer la opinión de los regantes para, a partir de ahí, dar los pasos necesarios para diseñar la infraestructura adecuada, la que hace falta, con la premisa de llevar a la Ribera todo el agua necesaria y disponible”.
Para el parlamentario de Geroa Bai “ahora entramos en la fase de definir alternativas por parte de quien resulte adjudicatario, con toda esta valiosa información, y en unos plazos ya tasados. A partir de ahí será la sociedad CANASA, con el necesario acuerdo de los dos gobiernos, quien deberá de tomar las decisiones sobre la obra concreta a desarrollar teniendo en cuenta costes y condicionantes técnicos y medioambientales. Desde Geroa Bai consideramos que cualquier decisión sobre el número de hectáreas finales de riego tendrá que tener en cuenta la opinión del conjunto de regantes implicados en el Canal y el hecho de que la concesión y dotación actual de agua es de 6.400 Ha/año.”